sábado, 7 de diciembre de 2013

Hablar de nada


Hablar para decir algo de nada, parece una tarea imposible, pero eso no la hace desechable. Es como estar en una habitación cerrada, no obscura, cerrada, y tener la convicción de que en algún lado está la salida. Es una nada acotada, un descanso forzado en el camino, un no saber de donde se viene ni hacia dónde se va. Es un incómodo sinsentido. Pero es una nada que viene de la mano de un saber: de que un día las palabras se enlazarán con las cosas. Que entonces el mundo revivirá y volverá a ser reinventado infinitamente. Es una nada que no sabe si volverá a ser un mundo de amores o de dolores o sólo será otro mundo, diferente, sorprendente. Sólo sabe que será, cuando las palabras se hayan cansado de no encontrar la emoción. Cuando se olviden de no sentir. De no ser. Si las palabras no sienten no son palabras, son apenas esa nada que desborda.

jueves, 17 de octubre de 2013

Devaneos de un desvelo

Esa inquietud, siempre esa inquietud. 
La que no se aquieta. 
No es hoy, siempre fue la inquietud. 
Ni es la forma ni el contenido, ni la potencia ni el acto, es otra cosa.
Es un modo. 
Es un algo que excede. 
No es una cosa ni la otra, es algo más. 
Es lo que desborda y a la vez, lo que el alma aprecia. 
El alma, así, sin adjetivos, el alma del que la tiene. 
Del que no la ha perdido. 
Del que sabe que es el álito de la sobrevivencia en este mundo,
sólo uno de los posibles. 
Del que mira una imagen y la ve recortada en una tela. 
Del que escucha a los pájaros y los traduce a melodía. 
Del que ve una piedra y descubre su contorno. 

Los que sobreviven son los que encuentran el camino de los cielos.
En los confines de sus mentes. 
Los que pueden viajar a ignotos lugares sin salir de su morada.

Todo ello y algo más es la vida humana. 
No un transcurrir sino un significar, un interpretar, un inventar.
Es un creer, una ilusión, una mentira vital. 
El engaño es lo esencial de la vida. 
Y cuando cae el engaño viene el dolor. 

El que escribe se sabe inventor de engaños.
Fabulador del mundo y de la vida,
sólo una de las posibles. 



jueves, 18 de julio de 2013

inexorable vida

tus manos heladas
en las mañanas blancas
esperaban que el mundo
admirara tus ansias
de resistir los dolores

desanudando ataduras
en la alborada
imaginaban ser libres
pagando con martirio
ignotas culpas de tu alma

aún así
la inexorable vida
no escuchó tus reclamos
y finalmente se fue
aquella que te amaba


sábado, 6 de julio de 2013

La prohibición


Hoag le informa a Randall y Cynthia que ha descubierto en nuestro universo algunos defectos menores: serán rápidamente reparados en las horas siguientes. Ellos ni siquiera advertirán el cambio siempre y cuando al volver en su auto a Nueva York nunca bajen la ventanilla, en ninguna circunstancia y a pesar de lo que vean. Hoag parte; aún exitados Randall y Cynthia inician el regreso al hogar.
Mientras respetan la prohibición no sufren ningún contratiempo. Pero a cierta altura del camino presencian un accidente, un niño atropellado por un auto. Al principio la pareja conserva la calma y no se detiene, pero cuando encuentran un patrullero prevalece su sentido del deber, y se acercan para informarle lo que han visto. Randall le pide a Cynthia que baje un poco la ventanilla:
Ella obedeció, y en seguida aspira profundamente, tragándose un grito. No gritó, pero quiso hacerlo.
Fuera de la ventanilla abierta no había sol, ni policía, ni niños, nada. Nada salvo una niebla gris e informe, latiendo lentamente como si tuviera una vida rudimentaria. A través de ella no podían ver nada de la ciudad, no porque la niebla fuera demasiado densa, sino porque estaba…. vacía. De ella no se desprendía ningún sonido, no se veía en ella ningún movimiento.
La niebla se mezcló con el marco de la ventanilla y comenzó a penetrar en el interior del auto. Randall gritó: ¨!Cierra la ventanilla!¨. Ella intentó hacerlo, pero sintió las manos enervadas, entonces el propio Randall se tendió e hizo girar la manivela, subiendo la ventanilla a su sitio.
Reapareció la escena bañada por el sol, a través del vidrio vieron al patrullero, el juego tumultuoso, la acera y, más allá, la ciudad. Cynthia le puso una mano en el brazo. ¨Vayámonos, Tedy!¨ ¨Aguarda un minuto¨, dijo él tensamente, y se volvió hacia la ventanilla que tenía detrás. La bajó con mucha cautela, quedó apenas una grieta, menos de un centímetro.
Fue suficiente. El flujo gris informe apareció de nuevo allí, a través del vidrio se veía el tránsito de la ciudad y la calle iluminada por el sol, a través de la apertura… nada.

Fragmento textual extraído del libro ¨Mirando al sesgo¨ de Slavoj Zizek sobre una novela de ciencia ficción de Robert Heinlein titulada La desagradable profesión de Jonathan Hoag, Ed. Paidós, 1991, p.32

viernes, 12 de abril de 2013

Encontraremos siempre los mismos viejos miedos




 
So, so you think you can tell
heaven from hell,
blue skys from pain.
can you tell a green field
from a cold steel rail?
a smile from a veil?
do you think you can tell?
And did they get you to trade
your heros for ghosts?
hot ashes for trees?
hot air for a cool breeze?
cold comfort for change?
and did you exchange
a walk on part in the war
for a lead role in a cage?
How i wish, how i wish you were here.
we're just two lost souls
swimming in a fish bowl,
year after year,
running over the same old ground.
what have we found?
the same old fears.
wish you were here.

Así que crees que sabes distinguir
el paraiso del infierno
cielos azules del dolor
¿puedes distinguir un campo verde
de un frío rail de acero?
¿una sonrisa de un velo?
¿crees que puedes distinguirlos?
y ¿consiguieron transformar
tus héroes por fantasmas?
¿cenizas calientes por arboles?
¿aire caliente por una fria brisa?
Poco consuelo por monedas?
Y ¿cambiaste participar en parte de la guerra
por un papel principal en la jaula?
Cómo deseo, cómo deseo que estés aquí
somos sólo dos almas perdidas
nadando en una pecera año tras año
corriendo siempre sobre
el mismo viejo suelo
¿qué hemos encontrado?
los mismos viejos miedos
deseo que estés aquí.
 

martes, 2 de abril de 2013

Búsqueda, más allá de lo aparente

El alma no tiene décadas:
un joven de hoy
contiene la búsqueda
eterna de un ayer


y es nuestro, vive acá
en Mar del Plata


Nunca sabrán que nos importaron




No más lágrimas

¿cómo estás amigo?
por la muerte de aquellos que no conocimos,
nos arrodillamos y decimos una oración
nunca sabrán que nos importaron,

Mantendremos el fuego ardiendo
mantendremos la llama viva
trataremos de recordar
lo que está bien y lo que está mal.

No mas lágrimas, no más lágrimas
si hemos de vivir por cien años
amigos, no más lágrimas.

Si nos olvidamos de ellos
y del sacrificio que hicieron
la maldad y la tristeza
vendrán a visitarnos otra vez.

Bailaremos la danza en la luz solar
beberemos el vino de la paz
nuestras lágrimas serán de alegría
mantendremos controlada a la bestia

No más lágrimas, no más lágrimas.
Si hemos de vivir por cien años
Amigos, no más lágrimas

En nuestro interior el grito es silencioso
en nuestro interior debe permanecer
Sin vencedor, sin vencido
solo horror, solo dolor

No mas lágrimas, no más lagrimas,
si hemos de vivir por cien años,  
amigos no más lagrimas

No mas lágrimas, no más lagrimas,
si hemos de vivir por cien años,  
amigos no más lagrimas

viernes, 29 de marzo de 2013

Remember

cuando me buscabas en esa noche sonora
envuelta en melancólico amor




Recuerda cuando eras joven
Brillabas como el sol.
Sigue brillando, diamante loco.
Ahora hay una mirada en tus ojos,
como agujeros negros en el cielo.
Sigue brillando, diamante loco.
Quedaste atrapado en el fuego cruzado
de la niñez y el estrellato
levado por la brisa de acero
Adelante, tu, objetivo de risas lejanas
Adelante, tú, leyenda, tú, mártir.

Y ¡brilla!.
perseguiste el secreto demasiado pronto
y lloraste por la luna
sigue brillando, diamante loco.
amenazado por las sombras de la noche
e indefenso en la luz.
Sigue brillando, diamante loco.
Dejaste de ser el bienvenido
con precisión aleatoria
cabalgando la brisa de acero.
Adelante, tú, loco delirante y visionario
Adelante, tú, pintor, tú, gaitero, tú, prisionero,
Y ¡brilla!.
Remenber when you were young,
you shone like the sun.
Shine on you crazy diamond.
Now theres a look in your eyes,
like black holes in the sky
Shine on you crazy diamond.
You were caught in the cross fire,
of childhood and stardom
blown on the steel breeze
Come on you target for faraway laughter,
come on you stranger, you  legend, you,youmartyr,

And shine!.
you reached for the secret too soon
and you cried for the moon.
shine on you crazy diamond.
threatened by shadows at night,
and exposed in the light.
Shine on you crazy diamond.
well you wore out your welcome
with random precision
Rode on the steel breeze,
Come on you raver you seer of visions,
Come on you painter, you piper, you prisioner,
And shine!


domingo, 24 de marzo de 2013

Proximidad

Mueve angustia mi enervada pluma
conectando imágenes errantes
de inasibles momentos
y esquivos pensamientos
atrapando imprevistas, las palabras
para decir lo que digo
que no es todo lo que siento
pero en algo se aproxima.


Su mano ató mi mano a su pecho
buscando abrazar mi espalda
ordenó mi paso ansioso
descubrió fuertes secretos
en mis ojos escondidos:
supo que el mundo me hiere
que hoy le niego mi mirada,
que quiero cuidar mi cuerpo
de los fuegos del infierno.

Supo que aún sabiendo que miento
insisto en seguir soñando
porque en la realidad del sueño
me socorre el don borgeano
de decir sencillo, lo simple y lo cotidiano
mientras llegan imprevistas, las palabras
para decir lo que digo
que no es todo lo que siento
pero en algo se aproxima.

Sin tiempo

en el alma
me sostengo en instantes
soy lo que recuerdo
mientras transcurre hoy

sábado, 16 de febrero de 2013

Cuando el tango llega a tu vida se queda en tus pies

Porque el tango se siente y no es cursilería. No es parodia, ni figuras estudiadas. Es conexión, es milagro. Es nuevo cada vez. Ocurre entre dos y los demás también lo sienten. El tango borra edades y prejuicios. El tango envuelve y sin saber ni cómo ni por que, el tango crea el prodigio de la belleza y la emoción.

............  
Esta noche de luna

Acercate a mi
y oirás mi corazón
contento latir
como un brujo reloj.
La noche es azul,
convida a soñar,
ya el cielo ha encendido
su faro mejor.
Si un beso te doy,
pecado no ha de ser;
culpable es la noche
que incita a querer.
Me tienta el amor,
acércate ya,
que el credo de un sueño
nos revivirá.

Corre, corre barcarola,
por mi río de ilusión.
Que en el canto de las olas
surgirá mi confesión.

Soy una estrella en el mar
que hoy detiene su andar
para hundirse en tus ojos.
Y en el embrujo
de tus labios muy rojos,
por llegar a tu alma
mi destino daré.
Soy una estrella en el mar
que hoy se pierde al azar
sin amor ni fortuna.
Y en los abismos
de esta noche de luna,
sólo quiero vivir,
de rodilla a tus pies,
para amarte y morir.

Acércate a mi
y oirás mi corazón
contento latir
como un brujo reloj.
Mi voz te dirá
Palabras de miel
que harán de tu pecho
fuego encender.
El canto del mar
repite en su rumor
qué noche de luna,
qué noche de amor.
Dichoso de aquel
que pueda decir,
yo tengo un cariño
qué dulce es vivir.

Corre, corre barcarola,
que la luna se escondió.



Orquesta: Carlos di Sarli
Voz: Roberto Rufino
Letra de Hector Marcó


Un hombre, una mujer, una conexión

 y un vals

lunes, 11 de febrero de 2013

El pianista

Al no haber palabras que alcancen para decir tan sutil sentimiento, busco alrededor de su imagen, su sonrisa, su gesto y en las cadencias melodiosas que estremecieron mi alma escondida en su secreto rincón. Y descubro que el hoy viene de mi ayer en tenues sensaciones. Aquel lejano instante, inmortal habitante silencioso, vuelve hoy en el pianista, en su rostro ingenuo, en su juventud inconciente, en sus manos, en sus dedos que, veloces, acarician el teclado del viejo piano. Es él y aquel otro al mismo tiempo, sin saberlo él, sin esperarlo yo. Hasta parece que el tiempo circula en ciclos, por los mismos lugares, volviendo sin cesar a recuperar trazas de un tiempo perdido.  



Nocturne Op. 9, n.º 2 
Martha Goldstein tocando en un piano Erard de 1851.

domingo, 3 de febrero de 2013

Clarice Lispector (*)

 


Encontré su nombre en el blog de Bel M. llamado Amapolas en Octubre, de casualidad. Preferí leerla antes de interiorizarme del análisis que sobre su obra hace Bel en su tesis.

¿Cómo saber por qué me interesé?. No lo se todavía. Lo cierto es que fui a comprar alguno de sus libros. Hasta ahora he leído sólo las seis primeras páginas de La Hora de la Estrella y prontamente he sentido que la autora me escribe a mí, que escribe mi cuerpo escribiendo con su cuerpo de su cuerpo.

Su escritura tiene la belleza de la verdad sin referente, de lo real que nadie dice, no habla de historias complejas, sino del instante vivido, me habla a mí, escribe de mi pluma.

Clarice Lispector es el cuerpo en la letra, intenta decir algo más, ensaya romper un límite, de lo simbólico, del tiempo.

¨¿Cómo empezar por el principio si las cosas suceden antes de suceder?¨
¨Si esta historia no existe, pasará a existir. ¨
¨Sólo no comienzo por el fin que justificaría el inicio -como la muerte parecer decir sobre la vida- porque necesito registrar los hechos previos¨

¨¿Cómo es que yo sé todo lo que seguirá y que todavía desconozco, ya que nunca lo viví? ... Quien vive sabe, aún sin saber que sabe.¨



(*) Escribí esto en el 2011 y lo publiqué en otro blog que hoy tengo abandonado. Lo trancribo acá para una twitera simpática que preguntó por Clarice Lispector.

 

sábado, 2 de febrero de 2013

Un jueves diferente

La vida parece más vida cuando golpea el alma en forma inesperada. Sin apuro, sin buscar demasiado, cuando la quietud inunda, cuando sobrevive sólo un ligero alerta en la mirada, el oído y la piel. La Feria de Artesanos iluminada estaba allí.

De la mano del artista, que extrae de su propio cuerpo los secretos de lo sublime, me llega la obra más bella. Tan bella como el corazón de su autor, no puede ser de otra manera. 

Hoy ha ocurrido lo que es irrepetible. Fue un jueves diferente. La música silenció todos los ruidos. Se hizo oir, se hizo emoción, se enlazó a imágenes que fueron realidades. Nunca es nueva la emoción. Sólo el artista puede robar el hoy para llevarlo a lo ya vivido. El artista es el Señor del Tiempo.  

Fue un jueves diferente. Un banjo abrazado a su dueño, solitario y soñador, abriendo puertas sonoras hacia mi escondido ArcoIris, mi inaugural SuiGeneris y los rostros del amor.

Aladas manos sobre una guitarra, un melancólico violín y un piano armonizaban sonidos que volvieron a unir lo disperso. Infiltraron mi cuerpo de un pasado perdido, de reminiscencias a PinkFloyd, a colores y aromas de calles parisinas, a un antiguo blues y a un más lejano rag.

También fue un jueves en tiempo de tango, de instantes porteños al estilo del lánguido SanTelmo. Tuvo ese no se qué -¿sabe ud.?- que me trajo su voz y el ceño fruncido de su rostro austero. Su paso milonguero en el momento justo. El bandoneón que abre el fuelle insaciable y el compás que guarda el secreto de tantas emociones.

Y por fin, en ese jueves diferente, la joven titiritera, creando con su sólo movimiento, la vida en su escuálido personaje y su valija. El deseo de la artista, envuelto en música de organito, crea el alma. Es como Dios, hace su obra a imagen y semejanza. Sólo basta que haya una mirada, un oído y un corazón que lo reciba y el milagro se produce. Las palabras y las lágrimas vendrán después.
 

domingo, 20 de enero de 2013

poema sin nombre

oye ese latir
búscame allí que estoy
en el sitio del encuentro
otra vez, una vez más
siempre en el mismo lugar
sin morir, sin vivir
aquellos instantes
que quedaron quietos
cuando ocurrieron
donde no fueron
donde quedaron
desafiando el tiempo
en el único lugar 
sin vencimiento
donde eres tal como eras
donde me ves
ilusoriamente
incorruptible
en ese lugar eterno
dentro de mí
y de ti
inmortal
si


lunes, 14 de enero de 2013

La búsqueda vana

Buscamos lo perfecto, pero apenas encontramos su sombra. Como en la Caverna. Tal vez Platón tenía razón, de ahí la angustia. Si hay vida hay angustia, sino es otra cosa.

El arte es imperfecto, es como la vida. Lo que está hecho a pulso, late como el cuerpo. Sino es estático, inerte, le falta el tiempo. Si quieres vida, pues, que esto te cueste.

La vida es tiempo.

Un Anónimo me dejó este comentario un día: ¨No intentes explicar el porqué de los tiempos de olvido, ni aceitar tu memoria. No vale la pena esa pena. No vivas las quimeras que habitan tu alma...vive los ratos que aparecen sin causa , disfruta el momento . Recorre y atraviesa con intensidad éste, tu tiempo.¨

Y yo le contesté: ¨gracias Anónimo.¨

Debí agregar, ... ¨por lo que no podré hacer¨

 

martes, 8 de enero de 2013

una mujer solitaria

es quien ve lo que los demás no ven y sigue su camino

es la que sabe que aquel no volverá jamás

si es que alguna vez estuvo